Una SIM normal puede pasar de un teléfono a otro, pero ¿existe ese maluso con una tarjeta SIM multioperador nuestra? ¿Puede una persona hacerse con la SIM que está en un dispositivo e instalársela en su teléfono con mala intención?
Lo primero que impide el uso de una SIM en otro terminal es que, para acceder a la red, hay que configurar un APN que no viene por defecto en un teléfono normal y corriente. Por lo tanto, un usuario mal intencionado debería conocer ese APN y saber configurarlo en su teléfono para conseguir conectarse a la red. No representa un obstáculo importante pero un usuario malintencionado, pero ya marca una diferencia con una SIM normal.
La segunda posibilidad es verificar que una SIM se inserta en un terminal determinado e impedir su uso en otro terminal que no controlamos. Esto se puede hacer porque nuestra interfaz de gestión puede detectar el IMEI del terminal en el cuál se utiliza la SIM. Basta con verificar que el IMEI es el correcto para asegurarnos que se utiliza correctamente.
Otra posibilidad es establecer lo que se llama “listas blancas” que son listas que contienen los IMEI de los terminales a los cuales se puede conectar un dispositivo. El sistema detecta entonces automáticamente si el IMEI de este terminal están en esa lista o no.
A continuación puede entonces tomar una decisión si constatamos un maluso de la SIM:
- No hacer nada e indicar que ha habido un problema.
- Enviar un correo electrónico al administrador para indicarle que ha habido un uso incontrolado de la SIM.
- Bloquear el uso de la red para esa SIM hasta que utilice el terminal asignado.
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